Los Cazadores de Huracanes

Entrenados para hacer “locuras”

Estamos en plena época de huracanes* en el océano Atlántico y eso no es novedad. Cada año se deslizan varios huracanes con mayor o menor fuerza por toda la zona del mar Caribe. Lo que nos ha motivado a escribir en nuestro blog acerca de este tema es que este año tenemos un huracán que está batiendo récord de intensidad. No se registraba ninguno con estas dimensiones y altísimos vientos sostenidos desde hacía más de 100 años.

Y como a nosotros nos gustan los aviones y, por nuestro trabajo, también la meteorología, hemos querido saber más acerca de “Los Cazadores de Huracanes”, figuras claves para la investigación de estas fuerzas de la naturaleza que sacuden territorios sin piedad.

Los Caza Huracanes

Hace 50 años que un grupo de pilotos de las Fuerzas Aéreas de EEUU es entrenado para hacer locuras. Para hacer todo lo que se supone un piloto no debe hacer: entrar en el ojo de huracán después de cruzar una de las tempestades más feroces “diseñadas” por la naturaleza.

La idea es simple pero el vuelo es bastante complejo. Se trata de adentrarse en la tempestad, cruzar la pared de agua del huracán, que suele tener unos 670 kilómetros de diámetro en el Océano Pacifico, en el Atlántico es la mitad, e ingresar al ojo. No es un paseo para cardíacos ni epilépticos, advierten los pilotos. Una vez en medio del ojo, si pasa algo, no hay salvación, no hay a quien acudir. Y una expedición al ojo de un huracán puede tomar hasta 12 horas, sobre mar abierto. Y es que, por muchos datos que los pilotos dispongan antes del vuelo, como todo fenómeno atmosférico, estos pueden variar minuto a minuto.

La tripulación del WC-130 puede despegar con la idea de penetrar un huracán categoría 2 y al llegar al lugar toparse con uno de categoría 4. Y la diferencia es abismal, va de vientos con velocidades de 154 kilómetros por hora a 210, casi la mitad de la fuerza de desplazamiento del avión.

Los aparatos “Caza Huracanes” pertenecen al Escuadrón 53 de reconocimiento atmosférico que tiene su base aérea en Kessler, cerca de la ciudad de Biloxi (Mississipi). Está compuesto por 10 aparatos Hércules WC-130.

La tripulación está compuesta por cinco personas: dos pilotos, un ingeniero de vuelo responsable también por el lanzamiento de la sonda, un director de vuelo —que viene a ser el meteorólogo de las alturas— y un navegante. Las misiones consisten en hacer un reconocimiento del huracán, recabar los datos meteorológicos del momento y hacer una inspección visual del fenómeno.

El grado de máxima expresión del huracán es el 5 en la escala Saffir-Simpson, lo que significa vientos superiores a 250 km/h., inundaciones y un enorme potencial destructivo. Ésta es la categoría alcanzada por algunos desafortunadamente famosos, como el ‘Mitch’, el ‘Katrina’, el ‘Wilma’ o el ‘Gilbert’. Este último, conocido como el ‘huracán del siglo’ y ‘huracán asesino’, asoló el Caribe y el Golfo de México, y está considerado el mayor del XX. El más mortífero de la Historia ha sido el ‘Bhola’, que dejó medio millón de muertos en Bangladesh y la India en 1970.

En estos días estamos viviendo la llegada y consecuencias del huracán Milton que se perfila como el de mayor intensidad en la zona del Atlántico desde hace por lo menos 100 años. Las autoridades competentes han ordenado la evacuación de más de 1 millón de personas de la zona de Florida ante la llegada inminente del temido fenómeno”. Evacuar es cuestión de vida o muerte” son las palabras expresadas por el presidente Joe Biden y fuentes especializadas confirman que no exagera.

Si quieres sabe más acerca de los Caza Huracanes os dejamos este link donde se puede ver un avión en pleno reconocimiento del Milton: